Lo que quieras… lo que se te ocurra… todo es posible… todo está a tu alcance.
Desde descansar hasta agotarte.
Con niños, en familia, con amigos, en pareja, solo… para hacer turismo activo, para descubrir patrimonio…
En lugares como este, uno puede leer un libro a la sombra de una higuera, mirar las estrellas, ver atardecer y amanecer, subir una montaña, bañarse en el río, escalar paredes, descender barrancos, recorrer la sierra, usar la bici de montaña y la de carretera, ir a la piscina e ir a observar pájaros, dormir con la ventana abierta, dejar a los grillos cantarte una nana y a las golondrinas despertarte por la mañana.